miércoles, 1 de diciembre de 2010

A Alejandra Blanco, mi abuela.



Siempre ibas vestida
con un negro sagrado,
un paso invisible,
y tu moreno empezado,
que me dejaste
En el ADN de mi pelo rizado.
Tus manos de estrías y años
que me daban la leche
moderada de calor,
peinaban mis revueltos de cabeza
y le ponían caramelo a mi boca.

Tenías la vida cansada
Y en tus dedos montabas
mesa a los gatos entretenidos de tejado.
Ocupabas todas las misas de las doce,
como tu Pablo tomo en Teruel
el convento de Santa Clara,
para las tropas de Lister.
Abuela, le diste abrazo
a mi infancia temprana.

20 comentarios:

ángel de cristal dijo...

Te ha quedado muy bonita, aunque algo triste y seguramente que tu abuela es el angel que te abraza por las noches sin que tú puedas verla.

Un beso y cuídate.

LIA dijo...

JO! EDUARDO
ENAMORAS CON LO QUE ESCRIBES

BESOTES

Anónimo dijo...

Que hermosos versos Eduardo…

“peinaban mis revueltos de cabeza
y le ponían caramelo a mi boca…”

Es tan difícil no amarlas… es tan necesario recordarlas…

Es un placer encontrarte nuevamente publicando.

Un beso!

Ana dijo...

Nostalgia de ese abrazo de abuela pero es un poema precioso con una ternura inmensa.

Un beso Edu me ha gustado mucho

Anónimo dijo...

ESAS PERSONAS SON VERDADERA INSPIRACIÓN DE VIDA. POR ESO ANHELO SER UNA. BELLA DEDICATORIA.
UN ABRAZO

Lore dijo...

Que bello este homenaje a tu abuela,
esto dice tanto de tus sentimientos !!! y que hermoso el cariño de las-los abuelos. La mía ha sido como mi madre, ya que ella, mi madre murió cuando yo tenía cinco años...
Que no podria yo decirte de mi abuela!!!

Besitos cielo.

Silderia dijo...

Eso no me ocurre normalmente, pero me has echo saltar lágrimas. Y eso en mi no es muy normal cuando leo algo triste.

Besos, y me alegro verte de nuevo, aunque sea poco, me encanta ver que todavía tu pluma tiene mucho que decir por aqui.

Silderia

Mery Malaya dijo...

Tus versos se atravesado en mis ojos y en mi piel.
Tu poesía como siempre, espidérmica.

Un beso fuerte.

Mery.

Anónimo dijo...

Yo tampoco puedo soltar el recuerdo de mi viejita, la llevo latiendome en las entrañas.
Leerte me llena de ternura, que suerte que los dos se disfrutaran.
Un beso.

Marisol Cragg de Mark dijo...

Hay personas como tu abuela que dejan una gran huella de amor en el corazón. Bonitos versos los tuyos.
Recibe un cordial saludo desde Berlín.

La sonrisa de Hiperion dijo...

Siempre un placer estar un ratito entre tus cosas... Pasa un feliz puente.

Saludos y un abrazo.

Lucifer dijo...

Me has hecho llorar. Las abuelas son pilares fundamentales.

Dylan Forrester dijo...

Interesante poesía,
degustable por cierto.

Saludos.

Curiosa dijo...

"Abuela, le diste abrazo
a mi infancia temprana."
Qué hermoso final para tan emotivo poema. Justo en este tiempo en el que a los abuelos se les relega, como si sus conocimientos y vivencias no fueran vitales para el crecimiento de los nietos...

Muy bella e intensa tu poesía, Eduardo. Procuro visitarte cuando me es posible, aunque sigo "pachuchilla"
Un beso, espero que estés bien

Erika Alvarez Cuervo dijo...

que lindo, cuando las abuelas son soles que iluminan, la mia tambien se merece unos versos, bueno hojas y hojas escritas mas bien.

Marina Casado dijo...

Tus hermosos versos hacen que tu abuela me resulte familiar sin haberla llegado a conocer...
Un beso!

Amapola Psicovisceral dijo...

Jo..yo nunca fui muy cariñosa con mi abuela, y pese a que aún tendría timepo para serllo sé que no lo seré. también está en mi ADN.
Me alegro de que al menos tú se lo demuestres, y de tan preciosa forma

Cita Franco dijo...

Un homenaje muy tierno, seguramente tu memoria te pedía hacerlo.
Un caluroso abrazo, Edu

Anónimo dijo...

Que pases junto a los tuyos una Feliz Navidad. Besos!

Edu dijo...

Gracias por vuestros comentarios. Mi abuela era una de esas personas que se pueden catalogar como BUENAS.
Que tengais bellos dias.

Un Abrazo