sábado, 31 de enero de 2009

Mi pequeño Homenaje al 70 aniversario de la Muerte de Antonio Machado



España muerta, invadida de alambre y paredón, a tientas pies de exilio al paso de las montañas, soldados sin estado, estadistas sin ejercito, España herida en el Ebro, traicionada en los palacios de Europa, camina, se aleja de una Barcelona ocupada de flechas negras y generales tuertos. Se destierra, del olivo de Jaén, del barro de la Alcarria, de los paseos ajardinados de Madrid y se duele así misma, abandona la guerra y se refugia en los recovecos de las playas del mediterráneo. Que atrás quedan las milicianas atadas de niños a la cintura y fusil de trinchera al hombro, la tierra libre del campesino susurrado de alba, el Julio al raso de la luna en los parapetos. Huye recibido de nieve por los pirineos, el Greco y Velásquez embalados, mujeres despiertas de lágrimas, niños descalzos desafiando a la roca y al sendero.
Epitafio
Collioure, un patio de mar, lejos de los paramos de castilla, del agua levantada del Guadalquivir, con unos versos en el bolsillo como equipaje, nubes altas y un sol de espiga y pan, abandonado de infancia, Antonio Machado se muere con la España leal. Es Febrero y los olmos se secan de invierno.

jueves, 29 de enero de 2009

Mayo en una tarde de Paris, mientras me besas


Paris es como un escenario, de bailes de libros, pólvora de adoquín y vinilo de Edith Piaf, una fiesta de guitarra y cama, con un alba herido de playa. Te busco en las barricadas de colegio y de universidad y te encuentro levantada de bandera. La noche huele a utopía y tus labios se hermanan a los míos y el mañana galopa las calles. Tu boca tiene un toque de pincel y las estrellas tocan luz y se agitan como campanas de amanecer. Paris sabe a verso, tiene un día extenso de mayo, panfletos de cielos azules, pancartas de viento, Paris se traza en bulevares libres, el Sena tirita de agua y lloviznas de flores invisibles, caen en nuestros abrazos y en tus ojos el asfalto se desvanece y el mar se hace brava. Paris es una constitución con un solo artículo, que prohíbe el prohibir y en Montmatre tus besos se fatigan de algarada, en donde acaba Mayo y el azul vuelve al horizonte. Es Junio y en Paris, solo se besa en algún café abandonado de Vincennes.

martes, 27 de enero de 2009

Manifiesto de vida



Cuando Crezca la espiga de trigo en mi corazón, la tierra en mis ojos, la palabra abandone mi boca y mis manos escriben aullidos de viento, antes que la vida desgaste mi nombre y certifique de muerte mi historia, que el tiempo me desgarre del día, me borre con una losa de mármol. Hablare de las lunas dormidas del invierno, vencido de primavera, de la amnistía que el sol concedió a la noche, de la arena de mar que fue lapida de olas desorientadas, de el agua altiva que se desprendió del cielo, del beso que calladamente, dejo esparcido amor, de las nubes que asaltaron abril, de las flores sepultadas de llanuras de nieve tardía, de la lluvia que se hizo arco iris en el altiplano del horizonte, de los ríos que suben las montañas, que se alejan del océano, de los latidos que disemina el alma, esperando que el vivir no le asfixie. El día que el mundo me derribe de su seno, que la brisa y la luz, sean los únicos presentes de mi muerte, porque de mi vida ya hice muchos testigos.

lunes, 26 de enero de 2009

Un sueño de amor, de una noche de Enero




En la noche, soñé que amaba … y desde entonces, líneas escritas de mariposas aletean en mi cabeza, parecía tan real, que mi mano se adentro en el teclado y compuso estas letras que fui ordenando en la pantalla.

Bailas un tango en mi boca y en tus ojos tus pupilas me recuerdan a la luna quieta. Tus mejillas derraman mis dedos y tus abrazos me hacen desaparecer en ti. Mis manos se entretienen en tu cintura, que danza dentro de ellas. Deslizas un beso con sabor a labio y el cielo adorna de luz tu pelo y el aire voltea de invierno tus parpados cerrados.
Una sonrisa y los álamos se agitan con una aurora de viento, mis brazos retienen tu espalda y se borra tu blusa en sus visiones. Graniza un leve sol y sin querer dar atención al momento, mi corazón es una tumba para que guardes tus días anteriores a este y un futuro para tu nombre, apegado al mió. El horizonte, con sabana azul, será nuestra cama y tendremos como trastienda a las estrellas, te tapare de alba, que el roció sea tu agua y el amanecer tu champú y deja que mis labios sean la esponja que lave, tu cuerpo desnudo. Ponte el pijama de sueños y deja que te llene la mesilla de mañana de una docena de rosas eternas y que mi cara contacte con tu despertar y escriba en ti, un brote de poesía, como buscando en tu vientre los versos que le faltan, para ser un poema de color.

Que los sueños sigan dibujándose a carboncillo en los sueños.

domingo, 25 de enero de 2009

Ese Sur, de Mario Benedetti



Si cada día en el norte, morimos por el pase del tiempo, si los ahoras son adioses definitivos, y todo vuelve a resucitar en azules cielos de madrugada, si los despertares son elegantes invitaciones a abandonar los sueños y inventamos la esperanza en los ojos abiertos de la mañana, y perecemos en cada flor pisada, en cada tono del sol que desaparece y la lluvia son gotas de cristal desechas. Si mas abajo, cerraron las grandes alamedas a golpe de bota y corralito, de Bogotazos, invasiones de Hollywood y de dictadorzuelos de plátano y azúcar. Pero el sur, el sur según Benedetti, también existe y se despierta en reglones firmes de historia y toma la voz y dice y habla el mambí, el minero de mina de tierra que se abre, el poeta abandonado de país, el campesino de frijoles, el profesor de escuela de tablón y tiza, las mujeres de manos de café, el filosofo de fusil y pipa, el cura de teorías libres, el marinero de océano, el obrero de fabrica ocupada, el trovador de habaneras y el exiliado vuelve de las cordilleras vírgenes de los Andes a pisar las calles abiertas. Si, cada día amanecemos en el norte y en el sur, empieza a clarear.

sábado, 24 de enero de 2009

Tu puedes hacer el mundo.


Nieve que se suicida en julio, el viento en golpes de latidos de brisa incendiada, un arcoiris de sombras de estrellas, un beso enchufado al corazón, una mañana que se amamanta del sol, una luna con llagas de luz, unas olas de paso por la playa, una mano que escribe con ternura, horas que se encienden de segundos, un vals de bocas inquietas, esa madrugada de ruinas de la noche, un poeta que viola de amor el papel, una comunión de amantes y el mundo no quiere mudar su camisa de azul. El invierno, cansado de frió, deja en su testamento, un puñado de abril, una madeja de nubes, que huyen en un horizonte claro, el mar bebe oleaje de media tarde y desfilan soplos de otoño en tu pelo. Un escondite para vivir sueños en tus brazos, un poema que le canta al sur, un cantautor que pasa por aquí, un pintor de guernicas cotidianos, un guerrillero de pluma fina, un cuenta cuentos que apuñala rutinas y atardeceres aburridos de Domingo, un cantante con voz de cereza, una barraca de intelecto, un teatro de sonrisas, un diario que solo da noticias de amores que empiezan y versos en guerra, una nada llena de todo, una lluvia triste y que se pone contenta al tacto de la rosa, un canalla de guitarra que se manifiesta porque no cierren los bares al alba, los besos tuyos, la mañana nuestra, el sábado por hacer y cojamos una mochila de vida y caminemos.

viernes, 23 de enero de 2009

El lector es la razón del alma de quien escribe


Escribir, es justificarse de la vida, leerse así mismo el corazón, crear realidad a base de palabras y líneas. Cuando pensé este Blog, lo hice con la voluntad de someter Internet al verso, de decir, desposeyendo al habla de voz. Quise atar la lluvia a las letras, mover con mi teclado montañas nevadas de noviembre, que mi pantalla fuera una mujer cultivada de sonrisas y que sus ojos fuesen mis palacios de invierno a asaltar.
Esta columna cibernética, a golpe de letrilla y poema, de estrofa y párrafo, es un accidente de poesía.
Ahora que nadie levanta templos en acantilados del Egeo a Atenea, que las diosas no nacen en el seno de una concha compuesta de olas y que Isthar, se quedo para divinidad de bar de copas y las estrellas perecen a la luz de la ciudad, que los cantautores no riman las acordes al alba y solo se suicidan de amor los altares sin bodas. Es la hora de los poetas locos, de luna llena, de los pintores de bolígrafo y servilleta y los escritores de libros por escribir.
. Al final este espacio, soy yo en quien lee y quien lee, es parte de mí.

jueves, 22 de enero de 2009

La delgada delgadez


La palabra, siempre busca un espacio en donde vivir y espero que estas líneas ocupadas de reflexión, hagan pensar consciencias. Escribo, al detener mi lecturas a veces en espacios, en donde manos adolescentes, suelen escribir sobre la extrema delgadez de la mujer, como si Miguel Ángel fijara su pincel en lo fino, Verlaine manchara textos con poesía geométrica, Silvio Rodríguez, compusiera alguna canción al exilio del contenido o Rodín transformara la piedra en hueso.
La mujer es bella, cuando besa despacio, te alberga en sus ojos, te acurruca en ellos y te abraza en la noche para esperar juntos el amanecer. Es bella, al atarse el pelo y despeja los hombros o al dejar caer la melena en el aire quieto. Es bella, cuando mira y ladea la mirada, como si esquivase tu boca, porque la busca con sus labios. Al vestirse de simpatía y se pone un escote con sonrisa en la cara, teje sus piernas en nylon o te habla de lo abstracto, porque se distrae con lo concreto. La mujer es el primer verso que aprende el poeta, el destinatario de las flores cortadas de tu niñez, de cada dos latidos del corazón de un hombre uno de ellos,es por vivir, otro es por una mujer. Mujer huye del hombre que solo te ama, por tu silueta y no te quiere, por los sueños que se mueven en tu interior.

miércoles, 21 de enero de 2009

El verdadero Obama, vive cerca de ti



Hoy, después de que Obama, hablase de los que murieron en el barro de sal y arena, de las playas alambradas de Normandia, de los casacas azules de Gettyburg o los soldados de heroína y rock de las colinas de Khen Sam, de que una poeta, con toque de Walt Whitman y con sabor a campos de maíz, pintara de versos blancos el capitolio y escribiese con tez negra, en el alma algodonera de EE.UU. Y que sin ese Edgar Allan Poe del siglo XX, de nombre John Lennon, sin guitarra, ni ácidos, ni camas fumadas de hierba, sonara Paz, por los micrófonos conectados al mundo. Y que después que las palabrerías de la diplomacia, que en Gaza, solo ha dejado las piedras como una intifada muerta, es hora, es ahora, de recordar a todos los artistas sin galería, a los poetas de pequeños detalles y solo hacen poesía cuando dicen “Te quiero”, aquellos que se prenden a los sueños y no se sueltan en medio de una tempestad de realidad, a los que escriben corazones en las paredes en ladrilladas, a los que empiezan plantando un árbol y no saben que con el se hace un bosque, a los que le cantan a la mar, sin letra de Serrat, ni orquesta afinada, a los que usan a las estrellas como velas, al viento como violín , ponen un mantel de hierba y se besan bajo una silueta de luna. A los que encienden las calles de madrugada de pasos y bostezos y cierran los ojos en un descuido del autobús, tal vez para buscar de nuevo, el cuerpo que les hizo de almohada en la noche. A los escritores de barrio y spray, a los cantautores que tienen como casa discográfica el Metro de Madrid y como estudio un vagón medio dormido de mañana. A los manifestantes que exigen flores de abril en Invierno, a los que escriben cartas de amor, sin remitente, a los vagabundos de bares sin puestas de sol, al beso furtivo que desliza en un aula, en un papel de cuaderno con parada, en el pupitre de una chiquilla de coletas atadas y blusa violeta. A los floristas accidentales, que de pronto sacan una rosa de la mano para ti, a los luchadores del alba, a las bibliotecarios que no quieren que su biblioteca acabe en la letra Z, a la dependienta que te dedica una sonrisa y no te cobra, a las princesas sin coronas y que nos llenan los ojos de cuentos, a los superhéroes sin capa, ni calzoncillos rojos, ni pijama con una S tatuada, que pagan décadas de hipotecas, a los que se sublevan en Mayo y tiran arena de playa, a las pelirrojas que le cantan una nana a la luna con los pies, a los exiliados que dejo la paz perpetua, de un dictador de botines, Cruz de San Fernando y espada del Cid, a los curas sin iglesia, a los que solamente opinan en la barra del bar., a los que se quieren imposiblemente, a los periodistas que mienten a su editor y publican la verdad…a ellos, decirles que son mis Obamas del mundo y que gracias a ellos, “Otro mundo es posible”, sin necesidad de que hagan discursos de televisión y los aplaudan, futboleros de política y palmeros de mitin.

lunes, 19 de enero de 2009

¿Qué es Amor?



Amor es Cleopatra y Marco Antonio, en su barco de Nilo, Amor es lo que siente el poeta por el verso y este por el desliz de tinta. Amor es el toque de las olas en la playa, amor es Lancelot y Ginebra en su aventura de madrugada. Amor es el roce del sol sobre el mar, amor es los ojos que sonríen sin labios, el beso que pelea en una boca, el corazón que quiere volverse abrazo. Amor es para Orfeo, el aire donde duerme desvanecida Euricide. Amor es la espera del amante, en el desnudo de la noche.
Amor, es la sabana manchada de una orgía de piel, hacer figuras en el pensamiento con una sonrisa, de ese pequeño detalle, tal vez un lunar o el pliegue del pelo en los hombros. Amor es un librillo de Pablo Neruda, con doce poemas en corteza de
Rosas y una canción tocada desesperadamente. Amor es para la vía Láctea, la cola del cometa que dibuja en ella, una estela de luz. Amor, es para el caminante, el camino, amor es la mano que seca un retal de lagrima de la mejilla…
Para mi…amor, es que alguien, cierre los ojos y en su interior al abrirlos, este la huella de mi poema, en su sueño de medianoche.

domingo, 18 de enero de 2009

¿Es la palabra quien cambia el Mundo?



Fue el fusil y el partido, quien hizo revoluciones de invierno o el escritor de pipa y aquella Madre de libro. El seno desnudo, la pólvora y la subida del pan, asaltaron la bastilla o el pasquín y la enciclopedia. Las bayonetas de Boston o la constitución de Franklin, el adoquín lanzado o el poema de barricada, el Miguel Hernández de trinchera o el de verso. Quien cambia el mundo, el político de sillón o el poeta de viento y pueblo, la palabra o el rifle, el discurso o el corazón, el soneto o la bala. Quien soñó Roma, Esquirlo, Ovidio o las legiones del cesar. Quien tomo Troya, Ulises o Homero en su illiada de letras. Es el cantautor, guitarra en mano, cantando a la tierra o son los soldados de clavel. La poesía de Antonio Machado y su capitán de primavera o las algaradas de Diciembre en Jaca. El pido la palabra de Blas de Otero o los jerséis de cuello vuelto de trabajadores de fábrica. Fueron las flores colgadas en camisas estampadas, las sentadas de paz de John Lennon o la mesa y el despacho, quien contuvo el Napalm sobre Vietnam. Es la catedral o el alma, la reflexión o el impulso, la batalla o la universidad, el mitin o el cartel, el filósofo o el guerrero, el rezo o la espada…
¿Es la humanidad el verbo o es la fuerza?

sábado, 17 de enero de 2009

Soy las ciudades que sentí, con ellas me hice mayor




“Para escribir un verso, es necesario haber visto, muchas ciudades, hombres y cosas”
Malte Lauride
…y haber estado junto al mar (Edu).

Madrid…

Aristócrata y de motín, de chaquetas de pana Anti-OTAN, pluma de episodio Nacional, de asfalto desgastado, Cibeles de miliciana puño en alto, Velásquez fotografía en pinceles y las tijeras apuñalan siempre en Dos de Mayo.
Por ti pasearon barrigas ensotanadas, reyezuelos invasores a caballo, en ti ardieron iglesias y se encendieron llamas en los corazones, desfilaron obreros con traje de domingo, con fusil al hombro y se marcharon a una verbena de disparos y en Julio chillaron Rusia es culpable. El Madrid de Alberti, el que se durmió sin alba, Madrid de escarcha y calor, de horchata y limonada, de los solitarios, de los pintores mancos y los poetas de duelo en sable, de zarzuela y organillo, yeye, de Movidas rockeras y alcalde Filosofo, de voz con garraspera de Sabina y canta al alba con Aute, de primavera en las copas de los árboles del retiro, de Veranos y playa en el Manzanares, de inviernos de hambre y brasero, de ninguna estrella en el cielo, de noche con la luna encendida de cubata. Ese Madrid del que siempre intente huir, por esas tardes de hielos y rosas, Madrid, muere en mi, conmigo parasiempre.

La Habana

La Habana, suena a trova y sabe a tabaco y Ron. La Habana es una vieja pagina de la historia, letrillas de Guillen, devorada de caribe, de jóvenes madrugadas en tonos azules, por ella cantan Silvio y Pablo y en sus calles se detuvo el tiempo, a ver morir las olas en el Malecón. Perdona a mi corazón que quisiera quedarse en ti, en tus atardeceres encubiertos de mañanas, en esas noches de brillos salteados, en el discernir de tus días.

Paris

Paris es como un beso en la noche, si nunca has estado en ella, si no hay Barrio Latino, ni el cielo es azul, si el Sena no corre aguas abajo, junta dos labios, dos sentimientos, si pasearas por el Barrio Latino, si será azul el cielo y miraras al Sena a sus aguas claras, si, Paris, es un beso en la mejilla, en los ojos, en el alma.
Paris de corona decapitada y sable mosquetero, de columna de Marat, de guillotina y barricada a mosquete, de flores de paz, en donde buscamos la playa sin adoquines, donde prohibido esta prohibir, donde nos amamos en la pantalla de un cine, donde los filósofos hacen huelga y Rimbaud es detenido por contrabandista de versos. Donde creímos besarnos debajo de un letrero que decía Sant-Denis, en donde creí que te dije Te quiero.

viernes, 16 de enero de 2009

Solo en mis ojos, esta el Madrid de posguerra


El sol, no quería dejar a Madrid, en una noche de invierno, rasgaba el cielo, con uñas de luz y alguien me dijo, escritor de posguerra, pero Celia Gámez, no cantaba por Plaza España, "ya hemos pasao!", ni las castañas sabían a estraperlo, ni se deslizaba por Sol, flechas y yugos, camino de la nieve del Volkov. Los chopos estaban muertos de otoño y Madrid, no viajaba en tranvía. Atocha no huele a carbón, ni el Manzanares esta tendido de sabanas, no encontré noches de estomago vació, ni cárceles con poetas presos, las niñas jugaban sin comba, por la cuesta de Moyano, no estaba Madrid sucia de estrellas y las farolas no tenían bombillas de aceite. No estaba Pemán, dando discursos en verso, a caudillos invictos.En ello, ella, miraba con ojos de color, mi Madrid, de posguerra.

miércoles, 14 de enero de 2009

El deje Universal de Andalucía



Unas desafortunadas declaraciones, rancias y catetas, etnolingüísticas y de pandilla del Doctor Albiñana, a ellas les dejo, estas líneas Andaluzas.

Andaluces, de ojos llenos de olivos y manos desgastadas en la tierra, navegantes de mar y remeros del Guadalquivir, de dureza, de corcho y castañuelas. Sabe a andaluz, las montañas erguidas de nieve y bandoleros de trabuco y navaja. Los terraplenes de aceituna, pulmón de Andalucía. Jornaleros espigados de sol, levantados en el barbecho y atrincherados en los cortijos. En Andalucía los reyes lloran a las puertas de Granada y desaparecen reinos en las aguas del Guadalete. Andalucía es el puerto de América, Riego a caballo de un trienio liberal, barricadas en el Albaicin, en Triana, en donde los poetas líricos de Oxford mueren como soldados. En Andalucía las tragedias son a las cinco de la tarde y se calienta el botijo a la sombra. Andalucía se subleva en Marínaleda y la escribe Lorca desde Nueva York. En Andalucía se rinde el francés y las vírgenes y los santos son de copla. Andalucía se exilia con Alberti y se esconde en un patio de Sevilla. Andalucía tiene el alma dividida entre el Betis y el Sevilla y no paga a traidores.
Donde este un Andaluz hablando, habla Sierra Morena, la Macarena y Blas de Infante.

martes, 13 de enero de 2009

Detrás de cada palabra se esconde un hada que la impregna de magia



Leí, unas letras cinceladas de esa sustancia de la que deben de estar compuestos los sentimientos y me dio por escribir estas líneas, que quiero compartir (Compartiendo uno se siente menos solo en esta aldea azul) con tod@s, los que de vez en cuando os deslizáis por este universo que intento edificar con acuarelas de párrafos y voz de poesía.

Llueve gotas con semántica de invierno y hoy mi corazón dice y las palabras no saben explicar o tal vez no quieren. El anochecer golpea el cristal de mi mundo y se burla de la luz y sin dirección, mi alma se ata a las preguntas, queriéndose adentrar en el final de las respuestas y el hoy contesta sujetando la noche en las estrellas. Escribo y ese órgano interno que late como unas manecillas de reloj, cruje en un Bing Bang de letras…y el poeta desaparece dejando una silueta de versos.
Que es el poeta, sino el corazón propio de la palabra.

lunes, 12 de enero de 2009

Triste melodía de Lunes


Esta mañana, esa mañana hecha de tiempo y luz, en ese Metro, que mueve Madrid, que traslada a Madrid todos los días ordinarios. Encontré en un rincón de un vagón, aun violinista de rail, de subterráneo, afinando de tristeza notas, dando un tajo al silencio del recorrido, sonaba triste, en unos ojos vencidos de madrugada, en unas manos agarrotadas de vida, en miradas dispersas, distraídas de cristal, algunas parecían que estaban ausentes de todo, como queriendo escapar de ese convoy suburbano de monotonía y quizás del mundo. El violinista se perdió en la estación, dejando una partitura de lunes.


domingo, 11 de enero de 2009

La España todavía exiliada


Una compañera de letras recordaba en este espacio, una secuencia de la película “Las Lenguas de las Mariposas”, con aquel Fernando Fernán Gómez, adentrado de maestro, pedagogo de la naturaleza y de aquella frase de Manuel Azaña “La libertad no hace felices a los hombres, los hace sencillamente hombres”. Aquel pensamiento inagurado por Ferrer y Guardia, Giner de los Ríos y la Institución Libre de Enseñanza, de darme una generación educada en libertad y os daré una España nueva, se consumió en el exilio. Hoy que se concede la nacionalidad de este estado a los hijos y nietos de aquellos refugiados, a los que el poeta denomino de “La numancia errante”, pero hemos devuelto la nacionalidad, ¿aquellos que se les enterró de olvido?
Estos párrafos solo pretenden recordar…


Cansado esta la pluma, el escrito huido, el verso exiliado, el poema canoso, tus ojos han perdido el azul del cielo de Madrid, la juventud de tus miradas. Maleta errante, pies de exilio y Alberti buscando en un mapa de España, desde el Paraná, la bahía quieta de Cádiz, el puerto empezado de mar, de Santa Maria. Buñuel, se interna, en la cámara y el negativo usado y Cernuda, recuerda al vencido y fulmina al vencedor con palabras. Antonio Machado descansa en una tumba de camino y Juan Ramón Jiménez, se precipita en nubes blancas del caribe, a las que les da, el nombre de Platero. España olvida a su otra España, una España de poetas y soldados sin rendir, de pintores y campesinos fatigados de sol, de escritores sentenciados de letras y niños de barco sin rumbo. Despierta, desterrada de tierra, de nacimiento, la España huida.
Decadente la patria, que expulsa a soñadores de tinta y entrega al barrote y al ataúd, aun poeta de romance, de olivo y de ruiseñores de trinchera.

sábado, 10 de enero de 2009

Y sí Dios no Existe...



Y si Dios fuese, el polen que roza los pétalos nublados de color, de las rosas abiertas, el cielo que destruye de azul la noche, y si estamos hechos de trozos de azar, de pedazos de mar y restos de estrellas y Dios no es mas que nuestros sueños de caverna, de tribu. Y si el infierno es una ciudad de Gaza o unas ruinas de Sarajevo. Y el paraíso esta mas allá de Abril o es una boca chorreada de besos. Y si en la arena impregnada de nubes y sal de las playas que esperan olas, sean los templos de Dios y si una flota de versos, escritas en el desnudo de la piel, en letras amadas, fueran las catedrales de Dios. Y si la vida, en esta canica azul, salpicada de tierra, fuera Dios.
Vive, reza poemas, haz plegarias de amistad, ve a misas de luna, visita procesiones de agua, lee biblias de amor y escucha al sacerdote de tu corazón y ama. Y dona tu cuerpo, tu alma, a la primavera.

viernes, 9 de enero de 2009

Nieva..desde mi calle



Hoy, la poesía estaba escrita con un bolígrafo de nieve, sobre Alcobendas, a nevado nubes y cielo, invierno y partículas de algodón. La nieve nos visita, como estrellas blancas fugaces, nieva ceniza de jazmín, cae en el bostezo de la tarde, tras el cristal dormido del mediodía, copos de papel. Llueve cometas muertas. Enero, tapa de nieve el día asustado de sol, cubre con una lona clara, las horas del atardecer. Barre con nata de luna, las calles sin pasos, calzadas de soledad.

Exposición de Haigas en Alcobendas


Exposición de Haigas en Alcobendas, entre ellos de los poetas José Ramón Crespo y Eduardo Andradas.

miércoles, 7 de enero de 2009

España Cañi, de Charanga y Flauta.


Ojala, si, (y si quieres ponle unos acordes de Silvio Rodríguez) que alguien inventase la concejalia del amor, en donde uno pueda reclamar al Ayuntamiento, esos besos, que nadie quiso sumergir en una boca. Pero desgraciadamente algunos quieren que retrocedamos a la España del auxilio Social, del estraperlo, de la mujer recluida en el Gineceo como en la Grecia sofista de Sócrates. Uno de esos clanes se esconde, se atrinchera, se teje como logia nacional-Católica en el Consistorio de Galapagar, hoy desaparece la Concejalia de la Mujer, mañana sus derechos y Vitoria Kent, Clara Campoamor, Margarita Nelken, serán terroristas, agitadoras de lo amoral. Desde este humilde ámbito, quisiera dedicar unos párrafos, a estos gañanes políticos, de decisiones medievales.

Centinelas de occidente, franquitos de voz de pito, beatos de domingo, fenicios sin barco y con concejalia, notarios de la JONS. Landista y Santiagos Matamoros, juntos en un vals de Joaquín Sabina, súbditos del Poderoso señor Don Dinero, con permiso de Quevedo. Inquisidores de Bolsa, cuneteros de madrugada, piqueteros del alba, amargados de sacristía, cruzados del capital, becerristas y divisionarios azules, seminaristas de cátedra pocera, de porra y carlistada, que sois un tango, usado, desgastado, un carcomido panfleto de José Antonio. Cuarteleros, espadones de golpe y alzamiento, de una España, reflotada de versos de Peman, en cuardenillos escritos de imperios hacia Dios, con garabatos de Ernesto Gimenez Caballero. Ahora ya tenéis concejalias de la Familia, dentro de poco, quizás hasta una sección Femenina y una Falange subvencionada.

Salud y Libertad.

martes, 6 de enero de 2009

Soy lo que fui, un viajante por la vida.


Fui, unos ojos que despacio, miraban al Sena, que tuvo como estación Paris. Pasee por Paseos de Tilos, mojados de Septiembre y pensé que Berlín, era un muro ampliado de ciudad. Navegue con calzado, por estepas pintadas de frió, en una Polonia breve de sol.
Sin saber que más allá del Tajo, esta el Océano, sentí, que en Oporto, el mar, estaba expuesto en un escaparate pijo, para su venta. Fui arena en el Sahara y ventisca de piedra en Argelia. Un Rilke de cristal, buscando el otoño en Praga, un cielo atardecido de olas en la Habana. Una niebla del Tamesis y a Londres lo empaquete en mi maleta de corazón y le traje a Madrid, conmigo. Quise ser lago en Ginebra y abrazarme con la luna en un baile de agua. Soy un apatrida en Madrid y un madrileño, (con DNI de Alcobendas), del Mundo.

Que su nombre no se borre de la Historia



Trece sonrisas acalladas, trece bocas que ya no se extenderán enamoradas en labios ajenos, trece camisas manchadas del roció de la mañana, de las sombras de la madrugada, trece rosas, que no volverán abrazar cuerpos desnudos de adolescencia. Trece Rosas, enterradas de pólvora y tapias, Trece rosas deshojadas de primavera, trece rosas de un puñado de abriles. Que esos trece nombres no se describan de la historia.

domingo, 4 de enero de 2009

Firma Urgente con Palestina



Pido el verbo, la palabra, la voz, el corazón, las nubes, las manos, los sueños, el cielo, la poesía, la sonrisa, todo aquello que valga para firmar, que se pueda usar como papel, como pizarra, para escribir, SOLIDARIDAD, para poder firmar, en el raso de la noche, PALESTINA. Firmar, firmemos, como una quedada de cama de John Lennon, como un cuadro de Matisse, como una canción de Víctor Jara sin manos, STOP. Que los amantes hagan un alto en sus besos, que las guitarras lloren dulcemente como aquella tocada por los dedos de George Harrison, que los pintores abandonen sus pinceles, los arrojen a la profundidad del color, que los poetas dejen a la luna sin versos, por un instante. Firmemos, firmar, en los muros, en los espacios virtuales, en las sombras del sol, en la copas de los árboles, con mensajes al viento con dirección Tel Aviv. Firmemos, firmar, porque en Palestina, pueda vivir la paz.

sábado, 3 de enero de 2009

A Pablo, mi abuelo.


Pablo, nació, casi como el siglo XX, sin que nadie lo esperase. Pablo era un hombre de agua, de rió, del Jarama, del signo de la espiga, de donde se junta el trigal con el arcó iris, del barro y la lámpara de aceite. Pablo fue a la escuela, hasta los siete años, tenia como electricidad las estrellas, para garabatear palabras en una cuartilla sucia.
A su tío Emilio, le vistieron con un traje blanco de Nailon, un fusil máuser y un billete de guerra a Cuba, a combatir entre la caña y el fusil de los rebeldes de la manigua. Pablo contaba que siempre estaba cantando, entre el arado y la tierra destripada, como aquellos compañeros, que desembarcaron en Barcelona, en un barco impregnado en vapor, llenos de remilgos en el uniforme, con pies de malaria y abandonados por la Corona, pero no por la música y la alegría del regreso. Pablo vendía, con una carreta, los productos de la Vega, de las entrañas y las venas del campo. Se sentaba debajo de las higueras a dibujar, las mismas higueras que le daban sombra, el mismo rió, que se juntaba a su piel y en donde dejaba el alma nadando. A Pablo, como aun hijo de su siglo, le llamaron a filas, con un petate de piojos y un destino al Larache, protectorado en Maruecos, de una corona de truhanes, que mandaba a sus súbditos a morir, por un risco o un monte construido de piedras. Pablo, se perdía por los zocos, por la Grifa y el vino , la vida cuartelera y los paqueos de los moros. Y en ello, el Rey, como quizás todos los reyes suelen hacer, cuando agotan el trono, cuando saquean su Reino, partió al exilio, con maleta y sin corona.
Pablo volvió a su aldea, cercada de cereal, de chopos en vísperas de la cosecha.
Pablo, detecto amor, en su corazón y se esposo, como hacen los amantes antes de pasar por el altar, con la noche, como testigo mudo, la luna y los pajares. En Febrero de 1936, Pablo, salio elegido, concejal, sin sueldo, concejal del pueblo.Y en ello, llegaron sones de cuartel, de sotanas y el Frente de Gredos, el hielo portado en los huesos, las balas segando trincheras y desde aquellas posiciones regadas de obuses, ha Teruel, sepultado de nieve y de allí a la sierra del Espadan, a contener el empuje de los ejércitos mutilados de libertad, los peñicos, las ráfagas de mortero y cae herido, por no dejar un palmo de la Republica en manos del yugo enemigo. Valencia, el Mediterráneo, con sonrisa de sol, la brisa de sal, el cielo cargado de bombas, el hospital. Pablo deja la cama, las vendas y se marcha a la batalla, a los puertos de Castuera y el Calabazar, a cerrar brechas, a bayoneta. Asoman nuevos golpistas, Cartagena, 206 Brigada Mixta, Pablo, cree que su vida, quedara tumbada a la entrada del arsenal de la ciudad marinera, que la muerte esta tocando a la puerta de sus pupilas.
Cartagena sigue leal, es de Negrin. Marzo, cae, se desliza a paso de reja y de cerrojo.
Un día, uno de esos que jamás vio la línea de la batalla, que no conoció el olor de la pólvora, dice que todo acabado, que cada uno a su hogar, pero para ellos, soldados de un estado desaparecido, de un pueblo preso, su hogar será el presidio, las cunetas y las tapias acribilladas de desesperanza. Por los caminos de esa Castilla hecha de olivos y encinas, llega a su pueblo, escondido, ahora es un fugado de la nueva España. Camisas azules, vienen a buscarle, Ocaña, Alcalá de Henares, la soledad del preso, del condenado y la libertad cautiva, después de cinco años, su pueblo, es una sacristía de luto, de silencio, de derrota. Pablo ahora solo tiene el campo, como sin fin libre, las ovejas, la huerta y las llanuras que deja el surco, es un reo en la calle. Pasó el siglo, su siglo y pensó que uno muere con su siglo y un día de Enero del 2003, paro su corazón, lo paro de invierno, algo alejado, de la luz del sol, del jarama y del trigo verde de Abril, que le vio nacer, en donde aprendió amar y donde un día decidió luchar. En su entierro se coló la libertad.

jueves, 1 de enero de 2009

1959



Las altas olas del Malecón, golpean las ruinas de un Diciembre despertado en Enero. La Habana, clavada en las nubes, engalanada con sombras de flores, diseñadas por aguaceros leves de sol, en una Cuba con desfiles de Barbudos, uniformes de sierra, acumulados de historia y discursos de Trova y azúcar, de Guajiros y zafra. Estaba Cuba demorada de primavera y en ello, llego Enero. Y tu boca, sudada de sonrisas, corretea por las calles, las puertas y las ventanas abiertas y pisas mis ojos de insurgencia.